Dark Chronicle: Level-5 creó un videojuego (1 solo jugador) que es un magnífico juego de rol de acción en el que además de explorar, resolver puzzles y acabar con los enemigos, debemos reconstruir ciudades y viajar en el tiempo, formando una original, preciosa y divertida aventura plagada de sorpresas y llena de magia. Tiene hasta una pizquita de estrategia. Reconstruye el mundo con un curioso sistema de juego, en el que tienen cabida los combates de acción, la creación de inventos, etc. Es largo, espectacular, y sobre todo muy divertido: Una joya. Está traducido al español.
En el presente, un mundo perece. Una pequeña ciudad aislada permanece como el único reducto inalterable y precisamente será en ella, donde un despreocupado joven descubre un secreto que influirá en el curso de la historia y cambiará su vida para siempre. Mucho más que un simple RPG, Dark Chronicle nos combinará acción, aventura, juego de rol, elementos de simulación del entorno y un argumento épico con infinitas oportunidades para la diversión y la creatividad. Más de 100 horas de increible jugabilidad. Podremos explorar mazmorras, inventar artilugios, derrotar a cientos de monstruos en batallas en tiempo real y disfrutar de entretenidos minijuegos. Construiremos aldeas con todo lujo de detalles gracias a la función mejorada de Georama. Este consiste en construir en el presente para cambiar el futuro, ya que se trata de una máquina que planta árboles, construye casas y crea ríos. Alternaremos entre dos posibles personajes: Max y Mónica, cada uno con habilidades propias, múltiples técnicas de ataque, movimientos especiales y armas cada vez mejores, más la habilidad de viajar en el tiempo.
Tiene un argumento digno de cualquier gran producción del género, con un aire a anime que se respira por los cuatro costados y unos gráficos de estilo cell shading que son una auténtica maravilla, aunque no es un cell shading total sino más bien parcial, ya que son los personajes, enemigos y algunos objetos los que están recreados con esta técnica, pero en el resto de sus elementos y escenarios son poligonales a la vieja usanza. El motor del juego es el usado para las escenas cinemáticas, de esta forma se consigue una cohesión durante el transcurso del juego. El compositor principal de la mayor parte de la banda sonora de este gran juego es el compositor japonés Tomohito Nishiura. Presenta una gran jugabilidad acompañado de un control bastante sencillo e intuitivo, pero que deberemos controlar a la perfección porque el juego no es sencillo. No hay selector de 50/60 Hrz, pero las molestas bandas negras en la pantalla son casi inexistentes y la perdida de velocidad es casi inapreciable. Aunque puede llegar hacerse un poco repetitivo y algo dificil, es sin duda alguna un imprescindible más.
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